Me dicen reincidente,
porque siempre caigo
en tu recuerdo,
una y mil veces.
Caigo en ese pozo oscuro,
en el que tropiezo,
con tus sonrisas,
tus te quieros,
y caricias.
Vuelvo a dejarme llevar,
por tu mirada,
por tu entusiasmo por la vida,
y tus ganas de amar.
¡ Reincidente!
Eso,
me dice la gente.